IMPORTANCIA DE LA PREVENCIÓN
No aprendemos para la escuela, sino para la vida (Séneca).
Ya sabéis que no hay nada más sabio que un refrán, así que hay va uno: "Más vale prevenir que curar", con esta frase nos referimos a la importancia de la prevención, en este caso hablaremos de ella en nuestro campo, el educativo.
Si nos dijeran que dentro de veinte años tendremos colesterol, ¿qué haríamos?, probablemente comenzaríamos a controlar nuestra alimentación, empezaríamos a hacer deporte de forma regular y nos someteríamos a controles rutinarios para conocer nuestro estado de salud, ¡Estaríamos apostando por la Prevención!.
Nuestro trabajo, ser maestros tiene un vértice de adivino y casi con seguridad me atrevo a decir que en no pocas veces sabemos en que clase de persona se convertirá el niño o niña que está en nuestra manos, si le irá bien en los estudios, si tendrá problemas de comportamiento, si será una persona introvertida o si será una persona con predisposición a la tristeza o a la agresividad. Por ello la Prevención debe ser nuestra herramienta para poder ayudar, en la medida de nuestras posibilidades, a cada uno de los menores que pasan por nuestras aulas.
Los primeros años de la infancia, en los que se están aprendiendo nuevas conductas, no dejan de ser decisivos para el futuro desarrollo personal. En estos momentos es cuando se debe favorecer y proporcionar una educación de calidad en materia de competencia personal y social, pues los niños podrían ir adquiriendo progresivamente las competencias necesarias para prevenir a posteriori problema de carácter intrapersonal o interpersonal.
El paso de la infancia a la adolescencia se considera la etapa en la que los problemas de comportamiento de carácter externalizante o internalizante aparecen y se consolidad, para posteriormente con el paso de los años seguir creciendo y cronificándose. Se entiende por problemas externalizantes aquellas dificultades relacionadas con los problemas de conducta, la agresividad, la desobediencia, etc., problemas que afectan sobre todo a las personas que el sujeto tiene a su alrededor; los problema internalizantes incluyen los rasgos de ansiedad, depresión, retraimiento social, aislamiento, temor y quejas somáticas, problemas que afectan sobre todo a la persona (Méndez & Rodríguez, 2011).
La escuela de ahora, nuestra Escuela, tiene el reto de no solo formar a los alumnos en aspectos relacionados con el ámbito académico, sino que es necesario poner el acento además en contenidos relacionados con el desarrollo de intervenciones que se conecten con constructos relacionados con las Habilidades Sociales, la Inteligencia Emocional la Fortaleza Psicológica y la Resolución de Conflictos.
Cobra importancia la creación de intervenciones relacionadas con la generación, desarrollo y mantenimiento de herramientas que favorezcan habilidades de carácter personal e interpersonal, y es el colegio el mejor contexto para realizarlo ya que en él, el niño/a pasa gran parte de su tiempo y en el que este tipo de acciones pueden y deben implementarse. El entorno escolar permite incidir no solo sobre el niño que presenta alguna dificultad, sino que además lo hace con el grupo y las interacciones entre compañeros.
En revisiones recientes sobre los efectos de programas de prevención infantojuvenil (Stice, Shaw, Bohon, Marti y Rohde, 2009) se ha encontrado que el 41% de los programas analizados produjeron un efecto significativo de la reducción de sintomatología relacionadas con problemas internalizantes o externalizantes. Y entre el 22 y 38% de estas intervenciones previnieron la aparición de problemas más significativos (Muñoz y Beardslee, 2012). Aunque pueda parecer un porcentaje bajo es superior a muchos de los programas que se realizan para la prevención de otros problemas de salud (p. Ej. Obesidad, consumo de tabaco,…).
De otra parte, los estudios han encontrado que para optimizar la eficacia de los programa de prevención se recomienda que se realicen de forma intensa a lo largo de diferentes momentos del desarrollo y que incluyan como objetivos no solo una población en concreta sino que se implemente con un carácter universal en la que la aplicación impacte en todos los alumnos (Greenberg, Domitrovich y Bumbarger, 2001).
El programa “Conoce tus Habilidades” se ha desarrollado para ayudar a los centros educativos a desarrollar en sus alumnos las competencias y habilidades de carácter tanto personal como interpersonal, incidiendo a nivel molecular con alumnos concretos que presentan algún tipo de dificultad sociopersonal y a nivel molar con las dinámicas del grupo-clase, ayudando a los niños/as a crecer como personas positivas y al grupo-clase a desarrollarse como contexto adecuado para las relaciones sociales
Es un programa de intervención de carácter longitudinal y sistemático en el que se trabajará progresivamente las herramientas necesarias para favorecer la salud emocional y psíquica de los alumnos y del grupo, aspectos igualmente necesarios que el desarrollo académico.
Desarrollar este tipo de intervenciones, formar a los alumnos en estas habilidades, trabajar en prevención no es solo creer en ellas, no es un acto de fe, sino que es un axioma, una herramienta que debe quedar reflejada en la formación que debe ofrecer un maestro y por supuesto estar presente en el ideario de un centro educativo.
Os dejo aquí el enlace de las evaluaciones que durante el curso pasado se realizaron de las sesiones.
En estos documentos podréis encontrar:
- La evaluación del aprendizaje de las sesiones.
- La evaluación de la herramienta por parte del profesorado.
- La evaluación de la atención, satisfacción y ajuste de las actividades.
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